Maslow dijo que todos los seres humanos tenemos una tendencia natural a buscar la autorrealización, a encontrarnos a nosotros mismos para definir el sentido de nuestra vida.
En su famosa pirámide Maslow coronaba las necesidades del ser humano con las espirituales, de tal forma que cuerpo y espíritu son realidades complementarias, el ser humano necesita unos logros para sentirse a gusto con su vida, pero, tamnbién precisa satisfacciones espirituales.
El no alcanzar esas satisfacciones comporta un estado psicológico que, indefectiblemente conducen al malestar, al vacio, a la sensación subjetiva de infelicidad, de no plenitud.
Y, por tanto, el camino del encuentro conmigo mismo, con quien soy yo acaba resultando, inevitable para alcanzar el bienestar y darle un sentido a nuestra vida.
La sociedad en la que vivimos no resulta ser el mejor estímulo para buscar nuestra realización personal y., aunque los "nuevos" mensajes que nos llegan parecen encaminados a promover el bienestar emocional y espiritual( es en el fondo una verdadera patraña), sólo conducena movernos y permanecer en la "superficie", en lo superficial, consumiendo productos "buenos" para el alma y el cuerpo y, manipulando el mensaje en favor de las directricesmsociales que convengan al momento.
Todos sabemos que el mensaje "llega" a través de determinados sectores que propagan desde sus distintas adscripciones a "vias" de realización espiritual la necesidad de cultivar lo espiritual a través de una formación, experiencias y vivencias.
A esta situación se hace necesario añadirle, desde la autocrítica" la fuerte influencia ejercida por los nuevos gurus( psicoterapeutas, psicólogos, psiquiatras,etc)sobre anplios sectores de población en los que anida el "malestar", el vacio emocional, las dificultades de adaptación y los sentimientos de desesperanza.
Influencia que a veces se resuelve acercando a gran parte de estos sectores a la práctica y consumo de "actividades altamente favorecedoras del despertar espiritual" de una forma indiscriminada y que no siempre lo son.
Volviendo al principio, el camino del "despertar espiritual", el encuentro con quién soy yo, es muy probable que esté programado para emprenderse desde el momento en que se inicia la vida. Pero el momento en que cada uno de nosotros comienza a andarlo está estrechamente ligado al momento vital en que "comprendemos" que estamos( como decia de Mello)"porfundamente dormidos" y que la vida nos da un bofetón para despertarnos.
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